Su primera presentación de una obra en video se lleva a cabo en el IX Encuentro Internacional y I Nacional de Videoarte, efectuado en el Museo Carrillo Gil en 1977. Dicho encuentro fue organizado por Jorge Glusberg, del Centro de Arte y Comunicación (CAYC) de Buenos Aires, Argentina; y a él asistieron Nam June Paik, Shigeko Kubota, Less Levine, Leopoldo Maler, Juan Downey y Amerigo Marras, además de Pola Weiss.
Flor Cósmica, su primer trabajo de videoarte fue presentado en dicha exposición y Pola tuvo la oportunidad de encontrarse nuevamente con Nam June Paik y Shigeko Kubota.
A partir de ahí y a lo largo de 11 años, Pola produciría 38 videos de arte y tendría aproximadamente 47 exhibiciones de performance, videodanzas, así como obras en video; tanto en México como en el continente europeo, Venezuela y Argentina.
De los 38 videos de arte, destacan los de la década de los 70: Ciudad Mujer Ciudad, Somos Mujeres y sus experimentaciones en la videodanza: la triada Xochimilco, Papalotl y Videodanza.
Fuera del trabajo de retroalimentación de Flor Cósmica, el video de Ciudad Mujer Ciudad habla de una comparación entre la mujer y la ciudad, una a la que le falta el agua. Vivian Blackmore, la modelo del video aparece desnuda y danza sentada, mientras las incrustaciones de la urbe se proceden una a una; parece también conducir en el caos de la ciudad, mientras la voz de Pola dice:
“No hay agua, tengo seca la boca, pero contengo agua, porque lloro… Han bloqueado todos los ríos, teníamos tanta agua que sobraba. No, no hay agua. Ahora es agua y tierra, simple lodo…”
Pola realiza además un díptico de presentación, en el cual Juan Acha –teórico de arte– analiza los problemas visuales a los que se enfrenta la artista al realizar Ciudad Mujer Ciudad:
“En el caso de la cinta Ciudad-Mujer-Ciudad, son varios los problemas que enfrenta Pola Weiss –su autora– para solucionarlos con intenciones artístico-televisuales. Pero sólo quisiéramos aludir al que consideramos el principal y el más notorio: ¿Es o no cinematográfica la sucesión de sus imágenes? Nos referimos a la sucesión narrativa que nos suscita el hecho de que la cinta comience con alusiones a un amanecer y termine con denotaciones del anochecer. (Hábil recurso, por lo demás, para obligarnos a vertebrar figuras, perdiendo sus motivaciones visuales). El arte del video, implica de suyo, sucesión de imágenes cuyos conceptos básicos provienen del cine y han de ser utilizados con especificidad televisual. Para lograr ésta (aún en proceso formativo, repetimos), la mayoría de los artistas televisuales recurre a la pintura abstracta o bien a la frialdad antinarrativa del cine “underground” y del arte conceptual.”
Acha reconoce la dificultad de un arte que en México iniciaba, ya que en Estados Unidos se había desarrollado desde la mitad de la década de los sesenta, teniendo como pioneros a Nam June Paik y Bill Viola.
Además de Acha, muchos años después Mónica Mayer curadora de una muestra de video de artistas mexicanas, escribe en el folleto de presentación sobre Ciudad Mujer Ciudad:
“Pola feminizó el tema, trastocando la idea de que mujer equivale a naturaleza y hombre a civilización. Planteó el cuerpo como metáfora de la ciudad y a la ciudad asumida como performance: vivimos la urbe y ella nos vive.”
En Somos Mujeres, producido también en 1978, la videaortista busca retratar la forma de vida de las mujeres indígenas en la ciudad, haciendo uso de un zoom arbitrario y de tomas inestables (debido a no haber sido realizadas con tripié) combinando saturación de color y formas psicodélicas. Al respecto Jorge Carrasco cita al propia Pola, quien explica sus razones pararealizar este video:
"Me molestó sobremanera el concepto que recabé en una encuesta sobre las Marías, pues aunque no pertenezco a ninguna agrupación feminista, me siento obligada a tener una condición de clase como mujer. Y como tal, me siento responsable de decir cosas desde el
punto de vista femenino. El hombre está presente en mis trabajos, pero si uno se fija bien, siempre se ve desde el punto de vista de la mujer, de su deseo liberador y su necesidad reivindicadora"
Para 1979 lleva a cabo Autovideato –una biografía en video– que inicia con un texto dedicado a su padre, Polito, a quien le explica su dificultad para expresarse con palabras, ya que:
“ Ha cambiado mi forma de ver y oír. Ahora mi lenguaje es diferente. Vi de o tro modo la vida. Ya no tengo muñecas, ahora tengo un nuevo juguete: mi cámara, mi escuincla, y hemos hecho…bueno, quiero contarte la primera parte de mi historia…”
En esta obra, Pola inicia su trabajo autobiográfico y en varios de sus videos se reflejaran momentos de su vida, como lo hicieron diversos videoastas a lo largo de los años 70, ya que el video les permitía una suerte de autorretratos en movimiento.
Ya desde el inicio de los años 80, y habiendo logrado ser la “primera mexicana en el Museo de Arte Moderno”(1) de Paris, Pola inicia una rauda carrera como videoartista y a lo largo de la década producirá al menos tres videos por año, hasta llegar a 38 obras terminadas.
Dado que la obra de Weiss es basta, me permitiré continuar sólo con un análisis del video más destacado de los años 80: Mi Corazón.


1) Eso afirma Pola en su cuaderno de viaje de 1979, en el cual relata lo sucedido durante su estancia en Paris para la presentación de sus videos en Beaubourg.



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